El ex presidente de Costa Rica, Oscar Cesar Arias, recibe el galardón por su crucial contribución a la paz en Centroamérica. Comienza su carrera política como dirigente del Partido Liberación Nacional de Costa Rica y es electo presidente en dos oportunidades (1986 – 1990 y 2006 – 2010). Su acción fue fundamental para lograr la firma del Acuerdo de Esquipulas el 7 de agosto de 1987, un compromiso firmado por los gobiernos centroamericanos para poner término a la guerra civil que asolaba la región. Arias contribuyó a encontrarle una salida pacifica a las disputas entre las fuerzas del gobierno Sandinista nicaragüense y los ‘contras’ financiados por EEUU, y un mecanismo para canalizar el dialogo entre las facciones que combatían en Honduras, Guatemala y El Salvador. El conflicto centroamericano provocó unas 250.000 muertes entre las décadas del 70 y fines de los 80. La tarea pacifista del costarricense continuó a través la Fundación Arias para la Paz, una entidad que promueve el desarme, el respeto a los Derechos Humanos y la resolución pacifica de conflictos en todo el planeta. Fue premiado también con otras distinciones entre las que se destaca el Premio Príncipe de Asturias en 1988.