La Real y Distinguida Orden Española de Carlos III fue establecida por el Rey de España Carlos III, mediante Real Cédula de 19 de septiembre de 1771 con el lema «Virtuti et merito», con la finalidad de condecorar a aquellas personas que se hubiesen destacado especialmente por sus buenas acciones en beneficio de España y la Corona. Desde su creación, es una de las más distinguidas a nivel mundial. Aunque se encuentra dentro de la categoría de las Ordenes Militares desde su creación, formalmente se convirtió en orden civil en 1847. Tanto la Orden como las condecoraciones que se otorgan están reguladas en un Real Decreto de 1992, en el cual se fijó como objetivo ‘recompensar a los ciudadanos que con sus esfuerzos, iniciativas y trabajos hayan prestado servicios eminentes y extraordinarios a la Nación’.