La Guerra Ruso-Japonesa tuvo como fecha el 10 de febrero de 1904, fue un conflicto que surgió de las ambiciones imperialistas rivales de la Rusia Imperial y el Japón en Manchuria y Corea, y que concluyó con la victoria nipona (Japón). El conflicto se desencadenó en Manchuria y Mar Amarillo (al norte de Corea). En los últimos años del siglo XIX y principios del siglo XX, varios países occidentales compitieron por influencia, comercio y territorio en Asia Oriental. Mientras tanto, Japón se esforzaba por convertirse en una gran potencia moderna. La situación geográfica de Japón lo alentó a enfocarse en Corea y el norte de China, lo que chocaba con los intereses expansionistas rusos. Todo esto llevó al enfrentamiento de los ejércitos de ambos países. El resultado del enfrentamiento fue la victoria de japoneses y la derrota de los rusos.
