Un día como hoy en el año 1908, el arqueólogo italiano Luigi Pernier descubrió el Disco de Festos en una excavación alrededor del palacio minoico de Festos, cerca de Agía Triáda en la costa sureña de Creta. Las excavaciones no se encontraban en el palacio en sí, sino en las bases de un grupo de construcciones hacia el noreste, las cuales se enterraron debido a un terremoto hace miles de años. En la actualidad, el Disco de Festos permanece en exhibición en el museo arqueológico de Heraklion, junto con muchos otros artefactos de la antigua civilización minoica que regía su poder en Creta y las Islas Egeas durante el segundo milenio AC. Aún existen muchos misterios alrededor de la reliquia; nadie puede asegurar lo que dice, lo que es ni de dónde proviene. Hasta el día de hoy es uno de los grandes misterios de la arqueología.También han habido sugerencias que todo esto es una farsa perpetrada en el momento de su descubrimiento en 1908. Nunca se ha verificado científicamente su antigüedad mediante termoluminiscencia, por lo que puede ser más contemporáneo de lo que se sugiere. Los arqueólogos aún tienden a estar de acuerdo en que el Disco de Festos es un tesoro minoico genuino pero, más allá de eso, no están completamente seguros sobre qué secretos se encuentran inscriptos en su superficie.