Terminaba el siglo XVIII y las colonias lusitanas en Brasil atraviesan un momento de crisis económica que provoca el descontento de los sectores más humildes de la colonia. El 12 de agosto de 1789, un grupo de criollos de la ciudad de Salvador de Bahía integrados a la logia masónica liberal ‘Cavaleiros da Luz’, aprovecha la circunstancia para lanzar una proclama a favor de la independencia. Inspirados en las revoluciones francesa y norteamericana, reclaman el trato igualitario entre las diferentes castas de la colonia, el fin de la esclavitud y la libertad de comercio. Las autoridades portuguesas arrestan a medio centenar de revolucionarios. Tres meses después se ejecuta a cuatro de los detenidos y el resto es condenado a permanecer en prisión. Se trata de una de las más claras y tempranas expresiones del independentismo brasileño.
