El 5 de septiembre de 1997, en Calcuta, India, fallecía la Madre Teresa de Calcuta, a los 87 años de edad, a causa de un paro cardíaco. Años después, en octubre de 2003, ante más de 300.000 personas, fue beatificada por el Papa Juan Pablo II. Nació con el nombre de Agnes Gonxha Bojaxhiu en Uskub, Imperio otomano, el 26 de agosto de 1910. A temprana edad, decidida a destinar su vida a la religión, tomó el nombre de “Teresa”, inspirada en Teresa de Lisieux, Santa Patrona de los misioneros. En 1950 fundó la congregación de las Misioneras de la Caridad. En 1952 abrió un centro en Calcuta, y luego fomentó la expansión de su congregación en todo el mundo. Por más de 45 años, la Madre Teresa se dedicó a brindar asistencia a los pobres, enfermos y huérfanos. Su labor humanitaria le valió una gran cantidad de premios y reconocimientos a nivel nacional e internacional. Entre ellos se destaca el Premio Nobel de la Paz, que le fue otorgado el 17 de octubre de 1979 en reconocimiento a su ayuda a los pobres de todo el mundo, a quienes describía como encarnaciones de Jesús. A pesar de su frágil estado de salud y de las recomendaciones del Papa Juan Pablo II de llevar a cabo sus tareas con menos rigor, Teresa trabajó duro hasta el día de su muerte.