Desde 1914 México estuvo gobernado por presidentes provenientes del Partido Revolucionario Institucional. La unción del candidato del PRI para las siguientes elecciones, significa hasta 1997 su triunfo en las siguientes elecciones presidenciales. Luis Donaldo Colosio es designado candidato del PRI para los comicios generales de 1994. En su campaña despliega un discurso crítico a la gestión del presidente Carlos Salinas de Gortari y promete terminar con la corrupción y las iniquidades sociales que afectan a los sectores pobres de su país. El 23 de marzo de 1994, Colosio llega a la ciudad de Tijuana para dar un discurso en el asentamiento de Lomas Taurinas. Un sicario llamado Mario Aburto Martínez lo ejecuta a poco de terminar su discurso. Diversas investigaciones periodísticas han señalado la existencia de un complot gubernamental detrás del asesinato de Colosio y la idea que su muerte tuvo por objetivo frenar una corriente de cambio y transparencia dentro del PRI.