El conquistador español Pedro de Valdivia llega al valle del río Mapocho, que en ese entonces era habitado por los aborígenes de la etnia Picunche. Luego de entablar relaciones amistosas con los nativos, el 12 de febrero de 1541 funda la ciudad de Santiago del Nuevo Extremo. Desde su creación la ciudad debió hacer frente a las incursiones de tribus hostiles y casi es arrasada el 11 de septiembre de 1541 en un ataque de los indios Michimaloncos. Con la independencia de Chile en 1818, la capital recibió formalmente la nueva denominación de Santiago de Chile. Por hallarse en una región de alta actividad sísmica, la ciudad es escenario de frecuentes desastres naturales a lo largo de su historia. En 2010 su población alcanzaba los 6,3 millones de personas.